martes, 22 de julio de 2008

Consigue El Libro de las Estrellas

No te quedes este verano con las ganas de leer.

Si quieres algún libro de nuestro catálogo, pídelo:

pedidos@leguaeditorial.es

miércoles, 16 de julio de 2008

¡¡¡Ya está aquí!!!

Ayer por la tarde, después de muchos sacrificios, carreras y problemas conseguimos ver nuetro libro:



Esta semana empiza su comercialización. Pídelo en tu librería, y si no lo tienen y no te lo pueden conseguir, pídenoslo a nosotros.

viernes, 4 de julio de 2008

DICCIONARIO DE TÉRMINOS I

Ahora que está tan cerca la publicación de la segunda parte de El Libro de las Estrellas. El Señor Sha, tenemos que recordar algunas cosas, para que podamos aprender todo lo nuevo. Os invito a completar este primer diccionario de términos.

Galrd: Es un conjuro en el que se utilizan los Grafemas como palabras en una frase.

Grafema: Veinticuatro letras de un alfabeto mágico, surgido de las estrellas, que permiten acceder al Wyrd. Son como claves que abren y desvelan el interior de las cosas.

Mudra: Gestos de la mano en el aire, que reproducen la forma de los Grafemas. Permiten invocar su poder en silencio, o bien reforzarlos.

Önd: Aliento vital del Mago.

Stadha: Posturas que imitan los GRafemas, para reforzar su poder.

Wyrd:
Gigantesca tela de araña cuyos hilos están conectados con todo lo que existe.

Pon algún comentario con todos los términos que creas que faltan.

martes, 1 de julio de 2008

Un poco de geografía

Por si acaso, algún despistado, todavía no entiende cómo está dividio el mundo, vamos a explicar las tres zonas de El libro de las Estrellas.

País de Ys: país en el que viven Guillemot y todos sus amigos. En el capítulo primero de la primera parte de la trilogía (Qadehar, el mago), dicen:

"El País de Ys, como había aprendido Guillemot en clase de geografía e historia, había sido, hacía ocho siglos, un pequeño fragmento de las costas francesas, que se había desprendido de ellas durante una horrible tormenta. Entonces, Ys había flotado a la deriva, mar adentro y, a continuación, vientos en contra lo habían empujado hacia tierra, donde había recuperado su lugar. Pero era un lugar particular, porque el país, transformado en isla, no figuraba en los mapas y los habitantes de Francia ignoraban su existencia."



El mapa de la segunda parte tiene lugares nuevos, no te los pierdas


Mundo Cierto: El mundo real, donde habitamos los humanos, no hay magia, ni tampoco conocemos la existencia de ese otro país, solo algunos dirgentes políticos. Es el lugar al que van los hombres que no quieren quedarse en el País de Ys. A esas personas se las llama Renunciantes.

Mundo Incierto: Es un lugar del que se sabe poca cosa, hasta que Guillemot va con sus amigos a salvar a Agathe. A él solamente van los condenados en el País de Ys; era el castigo mayor. Esos eran los Errantes.


En la segunda parte del libro, Guillemot hace una explicación en clase de geografía. Cuenta a todos sus compañeros qué hay en el Mundo Incierto. Te invito a que compruebes lo divertido que puede ser ir a clase en el País de Ys.


El Mundo Incierto, visto por Guillemot

jueves, 26 de junio de 2008

El argumento de El Señor Sha

¿Quién es el señor Sha y por qué busca a Guillemot? Después de sus aventuras por el Mundo Incierto, Guillemot sigue demostrando que tiene una gran habilidad para la magia.
¿Son la Sombra y el Señor Sha, como dice la Guilda, la misma persona? Mientras Guillemot está en Gifdu, Qadehar va al Mundo Incierto para atacar al Señor Sha. Pero le tienden una emboscada y la Guilda le culpa de la derrota. Qadehar se ve obligado a huir de Gifdu en busca de la verdad. ¿Habrá un traidor?

"Esta novela está mejor hilada que el primer volumen; el relato es más atractivo y la descripción de la magia es más interesante. Es un libro que hechiza.”
La revue pour les enfants, Francia.


La segunda parte de una trilogía de la que se han vendido más de un millón de ejemplares en todo el mundo, que ha sido traducida a más de veinte idiomas y que se ha publicado en más de treinta países.

viernes, 20 de junio de 2008

La cubierta de El Señor Sha

Después de mucho trabajo, ya tenemos la cubierta de la segunda parte.
El diseño del libro lo ha hecho nuestra diseñadora Lucia Moretti. El dibujo lo ha hecho la misma ilustradora que la de la primera parte: Tatiana Delgado.
Las dos han desarrollado un trabajo excelente y aquí lo tenemos.




Ya queda menos...

lunes, 16 de junio de 2008

El primer capítlo de EL SEÑOR SHA

Así empieza El señor Sha.
Este es el primer capítulo. En breve tendremos la imagen de la cubierta.


EL CASTILLO DE BROMOTUL

GUILLEMOT se apresuraba por el sendero que recorrían varias veces al día los briosos corceles de los Caballeros del Viento. Era principios de otoño, y los brezos de la Landa de los Korrigans se engalanaban ya con tonalidades melancólicas. El invierno se anunciaba duro…
Guillemot se dirigía a grandes zancadas hacia el castillo de Bromotul, la fortaleza-escuela de la Orden. No tenía prisa porque temiera las malas pasadas de los Korrigans, que de todos modos no se acercaban jamás al sendero, sino porque llevaba una noticia extraordinaria. ¡Y estaba impaciente por compartirla con Romaric!
Estaba tan absorto en sus pensamientos, que hasta el último momento no se dio cuenta de que dos caballeros de armadura turquesa bajaban a galope tendido justo detrás de él. Se tiró a la margen del sendero y evitó por un pelo ser aplastado por las pesadas pezuñas de los destreros. Los Caballeros del Viento ahogaron un juramento y detuvieron inmediatamente sus monturas en medio de una nube de polvo.
–¡Eh, pequeño! ¿Va todo bien?
–Sí, estoy bien… señores Caballeros –respondió Guillemot, avergonzado, desprendiéndose del matorral que había amortiguado su caída.
Los corceles piafaban, sujetos, por fortuna, con puño firme por los Caballeros. Guillemot se echó hacia atrás el mechón de pelo castaño que le caía sobre la frente y recorrió cojeando ligeramente los pocos metros que lo separaban de los jinetes. Alzó sus luminosos ojos verdes hacia ellos.
–Ha sido culpa mía –se excusó, esforzándose por sonreír–. Estaba en las nubes, ¡no les he oído llegar!
–Lo principal es que estés ileso –farfulló uno de los Caballeros.
–¡Apuesto a que te diriges a Bromotul y que te han elegido para ser Escudero! –dijo el otro Caballero, que era tan rubio y espigado como su compañero moreno y fornido.
–Eh… pues no –dijo Guillemot, ruborizándose. Acababa de acordarse de que, hacía seis meses, su deseo más loco y más ansiado había sido pertenecer a la Orden de los Caballeros del Viento.
–¡A ver, Ambor! –dijo el Caballero que había hablado en primer lugar–. ¿Pero no ves que este chico lleva el zurrón de los Aprendices de Mago?
–¡Ah sí, es verdad! –reconoció Ambor–. Pues entonces, Bertolen…
Bertolen y Ambor intercambiaron una mirada y luego observaron a Guillemot con curiosidad.
–Dinos, hijo, ¿por casualidad no serás Guillemot de Troïl? ¿El que marchó al Mundo Incierto y combatió con las huestes de la Sombra?
Guillemot dudó, y luego asintió. ¡Todavía no se había acostumbrado a la fama que acompañaba a su nombre desde la aventura del verano pasado! Los Caballeros estaban exultantes.
–¡Es un gran honor para nosotros conocerte, Guillemot! –exclamó Bertolen.
–No, no, soy yo quien se siente honrado de conoceros a vos –balbució Guillemot, abrumado por tanto entusiasmo y admiración.
–¿Y qué te trae a la landa, Guillemot? –interrogó Ambor.
–¡Mi primo! Es Escudero en Bromotul y hoy es el día de visitas…
–Es cierto –confirmó Bertolen–. Sin embargo, el sol ya está alto en el cielo y te quedan dos horas largas de camino: no podrás pasar mucho tiempo con tu primo.
–Ya lo sé… –suspiró Guillemot–. Pero tenía un control de mates esta mañana, y no podía saltarme las clases… Y desde Dashtikazar no he encontrado más que un carro que sólo me ha hecho adelantar unas pocas leguas.
–Sabemos lo que es eso –comentó Bertolen guiñándole un ojo a Ambor–. Las matemáticas son importantes, ¡claro! Pero no hasta el punto de que te pierdas el día de visitas en Bromotul. ¡Anda, sube!
Guillemot necesitó varios segundos para comprender que los Caballeros le proponían llevarlo con ellos. Pero no se hizo de rogar y, con una sonrisa de oreja a oreja, saltó detrás de Bertolen.
–¡Genial! –exclamó.
–Sobre todo, agárrate bien –le advirtió el Caballero–. ¡No me gustaría que volvieras a revolcarte por los matorrales!
–¡A mí tampoco! –asintió Guillemot.
Ambor y Bertolen estallaron en carcajadas y soltaron las riendas de los caballos, que salieron a galope tendido. Guillemot se agarró al cinturón que sujetaba la espada de Bertolen y se dejó embriagar por la sensación de velocidad. Poco después, distinguía la silueta maciza del castillo de Bromotul.

martes, 5 de febrero de 2008

VUELVE EL LIBRO DE LAS ESTRELLAS

¡Buenas tardes lectores!

Tras dos meses de descanso, volvemos con la segunda parte de nuestro famoso Libro de las estrellas...¡Saldrá en librerías en abril! 
Mientras, como para Qadehar, el mago, compartiremos con vosotros los pasos que vamos dando hasta llegar a tener el libro entre las manos. 
Ahora, Alba Montes, la traductora, está traduciendo El Señor Sha...yo, que he leído la segunda parte en francés, no os voy a dar pistas. Eso sí: ¡como mola! ¡Esta segunda parte tiene un suspense que no nos deja ni parar de leer! 

Ya os iremos contando lo que pasa con nuestro libro...

¡Qué paséis un feliz día y hasta la próxima!